viernes, 6 de marzo de 2009

cuerdas...

saltar a la cuerda es una metáfora sobre alguna cosa que me he permitido olvidar...


Jugar a la rayuela puede ser innovador.
El plateado brilla si le da la luz, sino no es plateado.
Las azucenas llevan zeta, ce y ese, en ese orden.
Los espirales se cierran y se abren, o viceversa, como las puertas.
Jugar al ajedrez es como infinito, 2 a la 64 no es infinito pero es un montón de montones.
A veces soy tan parecida a mi que es casi imposible distinguir, otras soy absolutamente diferente.
Los caracoles tienen antenas, los canales de televisión y los celulares antiguos también.
Las noches y los días surreales son los únicos que viví.
Inmersa en un escrito dada...